Desde Estocolmo llegó el joven rey vikingo. Tenía el pelo largo y le
hacía el amor a su guitarra, como Jimmy Hendrix. Cargaba en su estuche
partituras de Bach y Vivaldi. Seguía el camino hecho por Ritchie Blackmore, Uli Jon Roth y Randy Rhoads. La vieja música venía a rescatar al rock pesado de su
estupor pentatónico, de su monotonía. Yngwie era su avatar y la guitarra un hacha que amolaba con lima, causando ondas en su diapasón. El festoneado le permitía pisar más suave y más rápido las notas. Con su destreza elevó el arte eléctrico a
la estratosfera de la dificultad. Ejércitos de escalas heredamos los que comenzamos, por aquel entonces, a crecer cayos en los dedos. Por
mi parte, aunque practique durante mil años, mis dedos jamás serán tan ágiles
bailando entre los trastes de una guitarra. Mi pajuela nunca será tan precisa y
articulada como la suya, cuando ataca sin piedad las cuerdas. Ni hablar de mi
presencia aterrorizada en el escenario. Yngwie siempre es la estrella; nació para el espectáculo y es fiel en estilo y actitud a la
época antigua que lo inspira. La música, como todo arte, es cíclica. Bien lo
dijo Wolf Marshall: si el solista parece hacer cosas imposibles, si parece que estrangula al instrumento y de su cara salen muecas diábolicas, de seguro estarás viendo a
Yngwie Malmsteen. Pero, mira de nuevo y escucha bien, Niccolo Paganini puede estar
también en la tarima.
Son suspiros, recuerdos, destellos, puños sobre la mesa y arcos de corriente. Son todos espectros que emanan y se enredan de una música muy especial.
Buscar este blog
Etiquetas
ambiente
(1)
astronomía
(4)
bitácora
(6)
Chile
(1)
ciencia
(7)
cuentos
(14)
documentales
(1)
ensayos
(8)
ficción
(16)
filosofía
(6)
heavy metal
(23)
humor
(1)
huracán maría
(1)
libros
(3)
microrrelatos
(4)
música
(25)
noticias
(1)
poesía
(14)
política
(4)
puerto rico
(5)
reseña
(7)
viajes
(2)
El Heavy Metal nuestro de cada día:

En la voz tranquila y profunda de Richard Dawkins comienza el octavo disco de la banda finlandesa Nightwish, Endless Forms Most Beautiful (2015). En el preludio; la calma antes de una explosión; el famoso biólogo reflexiona...
martes, 13 de febrero de 2018
El Heavy Metal nuestro de cada día: Yngwie Malmsteen
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Una actuación muy interesante: nunca me hubiera imaginado que una orquesta y un intérprete de Heavy Metal pudieran sonar así de bien. No entiendo nada de este género musical, tengo que reconocerlo, pero si es capaz de inspirarte a tí palabras tan poéticas, sin duda vale la pena :)
ResponderBorrar¡Un abrazo y feliz finde!
Saludos Julia. Me hiciste el día! Estaba convencido que nadie veía los videos que ponía en las entradas! Muchas de las bandas que escucho adoptaron ese estilo "neoclásico" que empezó a ser popular a principios de los ochenta. Luego llegó el grunge y todo se fue en otra dirección, pero ahora esta resurgiendo. Si te interesa escuchar algo más, te recomiendo Nightwish, una banda finlandesa que estoy escuchando mucho estos días. Gracias por leer y comentar!
Borrar